viernes, 26 de marzo de 2010

ASENTAMIENTOS en buenos aires





















Día 1: sábado 23 de mayo de 2009




El asentamiento existe, el asentamiento es real. Real no por el mero hecho de su existencia sino también en su acepción de realismo, tal como el surgido en la literatura hacia el siglo XIX de la mano de Jules Champlfleury en oposición al Romanticismo.

A diferencia de éste, el realismo, contemporáneo y compañero del nacimiento de la fotografía, buscaba describir lo cotidiano, lo típico, los personajes vulgares, siendo testimonio de la realidad con descripciones detalladas y prolijas que fuesen vehículo de una descripción lo más fiel posible de la realidad.

El visitar el asentamiento me obliga a tomar una posición en la realidad, a testimoniar por medio de escritos lo que ocurre ahí y la función dentro de la sociedad que tenemos. No pudiendo permanecer inmóviles, sino actuando.



Los problemas que aquejan al asentamiento, según pudimos observar casi fotográficamente, es decir viendo las imágenes crudas que se nos presentaron pero sin un estudio ni conocimiento profundo del caso, son de tipo sociales, humanos y políticos.

Entendemos, a priori, que hay una relación directa entre las personas y su entorno social y económico y buscaremos transmitir nuestra experiencia en el lugar de la forma lo más verídica y objetiva posible; sin renunciar, por supuesto a la significación política que todo acto del hombre tiene y al fin último que tiene esta crónica, que es una reversión de la situación en la que vive la gente a la que aludimos.

Sabemos que estas situaciones son testimonio de una época, de una país, de una clase social, de los oficios que desarrolla la gente alejada del estudio, y queremos dejar testimonio de esto para que los que no tienen voz en los medios, adquieran un conocimiento dentro de la sociedad a fin de que no se permita, no se oculte, no se calle, no se silencie nunca más las situaciones de indigencia, de olvido institucional, de pobreza, de ocultamiento y de marginación en la que se encuentra esta gente.



Buscamos, por último analizar, describir, DENUNCIAR y MODIFICAR la realidad del asentamiento.

No podemos permanecer callados por más tiempo, no podemos permitir que las situaciones de este tipo se reproduzcan y se soporten.

No podemos ser tan hipócritas de bregar por la libre educación, por el derecho al trabajo, a la vivienda, a la libertad de culto, pensamiento y, en fin a los derechos humanos y por otro lado convivir y tapar con un velo la terrible realidad diaria en la que vive la gente del asentamiento.

2 comentarios:

  1. Creo que esto se da en todas partes del mundo, pero si debemos ser conscientes de que este problema existe y ser solidarios los de arriba con los de abajo para sacarlos a flote.
    Si no se hace nada por estas personas, es en vano la llamada de ayuda.
    Buen reporte!!

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  2. Gaviota querido, se extrañaban sus atinados comentarios!!.
    De todas maneras y, en referencia a lo que dice, no se si la solidaridad debe ser de arriba a abajo, eso tal vez suena a asistencialismo.
    Yo creo más en la organización de las fuerzas de abajo para arriba... pero.. son opiniones.
    saludos

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